Hay un hartazgo generalizado con la clase política en mi provincia (Tucumán), pero existe formas diferentes de gobernar y sobre todo de ser electo.
Así que podemos jugar un tiempo con nuestra imaginación y ver que si existiría una realidad distinta.
Participar del Proceso Democrático
Se levantó y tuvo ganas de participar del Proceso Democrático que se hacía cada cuatro años de una vez por todas, ya se había arrepentido dos veces hasta ahora.
Tenía muchos nervios porque debía elegir en que puesto postularse para ver si salía sorteado, total simplemente debía completar sus datos personales, aprobar el Examen de Participación Democrática de más de 300 preguntas de unas 1000 posibles la parte más difícil de todas y después cargar sus tres Propuestas Democráticas que debían ser desarrolladas si salía electo.
Las suyas habían salido ganadoras durante un concurso por su calidad cuando fue al Secundario Superior en una materia que se llamaba Participación Democrática donde todos podían armar sus propuestas desde ordenanzas, leyes, impuestos, organización, lo que se nos ocurra que integre todo lo que habíamos estudiado, era muy interesante porque como cualquier persona podía llegar a un cargo público muchos de esas propuestas eran puesta en práctica algunas veces.
Había pensado iniciar como concejal y no un cargo de dirección, porque pensaba que tal vez ahí podría generar algunas ordenanzas que consideraba que su ciudad le hacían falta, también le llamaba la atención ser Intendente, pero todavía lo sentía como muy grande además implicaba demasiada responsabilidad y podías ser expulsado si no lo cumplías correctamente así que perdías participar de un período de Proceso Democrático, realmente nadie quería eso.
Una vez echado a la suerte decidió postularse para ser concejal, para ese cargo se postulaban aproximadamente 30.000 personas para cubrir 10 cargos, eso sí todos podíamos participar del Proceso Democrático, pero solo podías elegir un cargo del cual podrías salir sorteado y algunos eran necesarios haber ganado 4 antes para acceder, especialmente el cargo de presidente de la nación, eran pocos los que podían cumplir ese requisito.
Ya había quedado en la historia esos viejos procesos democráticos capitalistas donde unos grupos económicos poderosos ponían personas en los lugares que les convenían armando hermosos discursos que nunca realizaban, habiendo miles de candidatos y generando sistemas extremadamente corruptos, ahora simplemente cada cual podía anotarse para el cargo que deseaba participar, y salir sorteado si la suerte lo ayudaba, sea del Legislativo o Ejecutivo, solo el Judicial tenía un carácter todavía que se visualizaba como anticuado aunque había tomado algunos criterios del Proceso Democrático como sortear aleatoriamente a los jueces que participaban de una elección de jueces.
De esta manera se lograba que cada uno participaba del cargo que deseaba sin presiones de grupos económicos o de algo que se solía llamar partidos políticos, al cual debías hacer lo que te pedían o estabas fuera, ya no se realizaban las campañas políticas porque resultaba totalmente innecesario y no existían las votaciones generales obligatorias, lo que evitaba un gran gasto de dinero que ahora podía ser destinado a combatir la pobreza, criminalidad e incluso se había logrado que los impuestos bajen porque las personas confiaban en sus representantes y muchas veces terminaba siendo un vecino, un amigo o incluso algunas veces un familiar ya que era raro que se comentará si participabas.
Se dio cuenta que lo primero que debía hacer para poder lograr participar era completar sus datos personales, que no tenga antecedentes penales, indicar si quería vivir dentro del Edificio Democrático que era una especie de alojamiento que uno podía elegir si decidía trasladarse hasta cerca de la función que le convenía, preparar sus cartas de renuncia a los trabajos que tenía y comprobar solamente que su identificación esté en condiciones.
Esa parte le resultó fácil de completar, ahora venía la segunda debía aprobar el Examen de Participación Democrática que todas sus preguntas y respuestas eran públicas pero tenías muy poco tiempo para responderlas y además resultaba imposible buscar las respuestas mientras que realizabas la evaluación, existía un sistema de bloqueo, además si registraban que intentabas hacer trampa no podías participar de ningún Proceso Democrático en tu vida y eso no era lo peor, más humillante era salir en el listado general aunque estaba codificado tu nombre y ver en qué lugar habías quedado pero si resultabas electo, este resultado se volvía público, eso también jugaba muchas veces a favor o en contra cuando se generaban discusiones sobre algún tema porque siempre salían a relucir “Los Resultados”.
También esto generaba que todos los cargos al ser aleatorios era muy fácil reemplazarlos en caso de muerte, amenazas o incluso secuestro, se había dispuesto que nadie era dueño del cargo sino la sociedad, así que cuando sucedían algunas de estas situaciones simplemente se sorteaba nuevamente y la rueda seguía.
Se había logrado disminuir a la mínima cantidad de políticos de toda la historia porque los cuerpos legislativos y senadores al no existir mayoría, ni minoría era necesario solo la décima parte en comparación del antiguo sistema.
Incluso se había logrado que las famosas fake news de tiempo pasados desaparecieran y que los periódicos empiecen a mostrar la realidad sin maquillajes, porque ya no era necesario convencer a nadie para que realice una elección, nadie encontraba ya sentido a generar rumores porque si se destituía a alguien, solamente se sorteaba nuevamente, así que nadie tenía certeza sobre quien podría ser el cambio, un verdadero avance que nadie había visto venir.
Al principio nadie creía en este nuevo sistema, fue necesario mucho hartazgo de la gente, que se funda un país, hambruna y mucho dolor para que los antiguos políticos, a regañadientes, realicen estas modificaciones.
Por eso pensó un momento y decidió anotarse para ser Concejal y dejar que la suerte decida su futuro, aunque sea durante cuatro años.
Un viejo anhelo
Después de haber escrito esto googleando (invito a todos los que quieran hacerlo también) descubrí que es un pensamiento bastante viejo denominado Demarquía o estococracia con un desarrollado mucho más profundo del expuesto pero que se observa que es una necesidad de vieja data sobre la necesidad de un cambio en los sistemas democráticos.